Tuesday, July 22, 2008

LAS RUINAS DE LA AGRUPACION DE AUTODEFENSA DE TRANCA, SOBRE EL VALLE DEL TOROBAMBA, EN LA MAR, AYACUCHO.
El mes de marzo estuve recorriendo varias comunidades de San Miguel y La Mar, en Ayacucho. Es una zona que en el pasado fue escenario de la guerra senderista y de la contrasubversión y resistencia de los comités de autodefensa.

Aunque hoy las distancias se han acortado con el avance de trochas y carreteras, varias comunidades todavía permanecen lejanas, sin servicios mínimos, menos con acceso carrozable. Entre las más cercanas a San Miguel, visité Santa Magdalena y Socos, Pampahuasi y Pampahuaylla. A pocos minutos de esa ciudad visité el pueblo de Patibamba. En las alturas del valle de Torobamba recorrí las comunidades de Allpacorral, Uras y Cochas, con sus anexos. Estuve en Anchihuay Sierra, las ruinas de la antigua aldea destruida por Sendero Luminoso en 1984, en sus anexos de Hatunpallcca, Totora, Putacca. Luego visité Chiquintirca, donde en 1923 un líder campesino se nombró así mismo presidente de la república, y en Anchihuay selva, formada con los emigrados por la guerra.

En casi todas se puede apreciar los restos de la guerra. Una arquitectura de ruinas de "aldeas estratégicas" o, como ellos las llaman, agrupaciones de autodefensa, se ven por varias partes. Esta es la más visible de todas. Se encuentra subiendo desde Ninabamba, se trata de Tranca, formada hacia 1984 y abandonada a mediados de la década pasada. Luego iré mostrando otras fotos. en la actualidad se ha vuelto al patrón de asentamiento disperso en las alturas, con poblaciones pequeñas que suelen ser sedes de comunidad o anexo, donde se encuentran la escuela y la iglesia, mayormente evangélica.
Salió Retablo nro. 21.
Va detalles del contenido de la revista de la Asociación SER

"Análisis Político: Paro en Ayacucho / Entrevista a Carlos Iván Degregori,Analista y ex Miembro de la CVR y a Eduardo Urbano Méndez, Presidente de laAsociación de Municipalidades del VRAE/ Las columnas de análisis de GermánVargas y Percy Rivas / Desarrollo rural: El 1015 y otros decretos, Legalpero Ilegítimo/ Agenda pendiente: Militares Norteamericanos en Ayacucho, Unapresencia polémica / Post CVR: Desenterrando la verdad / Historia: El poderlocal de Huamanga durante la independencia (1810-1835) / La región y suspersonajes: María Santafé, Madre Coraje."

http://www.ser.org.pe/components/com_remository/docs/CAT_REV_Retab_468.pdf

Hemos añadido un suplemento con el listado de las personas incritas en el Registro Unico de Víctimas en Ayacucho.

http://www.ser.org.pe/components/com_remository/docs/CAT_FOL_Suple_466.pdf

"Avance al 9 de julio 2008. El siguiente listado contiene los nombres de laspersonas que sufrieron diversas violaciones a los derechos humanos en Ayacucho y que ya han sido inscritas hasta la fecha en el RUV: Los inscritostienen derecho a las reparaciones del Estado, para el cado de las personasmuertas y desaparecidas, quienes tienen derecho alas reparaciones son susfamiliares directos (padres, hijos, cónyuge o conviviente)."


Un informe interesante en La república de fin de semana.

Diario La República - Online - Putis, 24 años después

Cierto que Putis es la mayor matanza perpetrada por el ejército, conocida hasta ahora. Pero no es la única. Estuve entre las ruinas de la antigua base militar de Huancapi hace unos tres años, y pude ver los restos humanos, prendas de vestir semienterradas, a poco de bajar por el barranco que señalaba un extremo de ése lugar.

La gente de Churcampa, Huancavelica, también me señaló el lugar donde saltaron restos humanos cuando un tractor movía la tierra adyacente a las ruinas de la antigua base militar, la misma que se instaló en el local del único colegio que había en el lugar en aquel entonces.

Hace un par de meses estuve en Cochas Baja, San Miguel, donde los pobladores me hicieron conocer el lugar donde están enterradas diez personas. Todas asesinadas por el ejército en su incursión de 1984.

La mentira con que se atrajo a la gente para luego asesinarla, la falsedad de la causa que declaraban los militares, son motivos que desacreditan los discursos de la democracia en lugares que tienen que esperar que se "descubran" estos horrores para ser miradas, atendidas, victimizadas a fin de cuentas, para atenuar en algo el impacto de un negacionismo vulnerado por la evidencia.